Al menos 10 familias de la parte alta del distrito de Paucarpata advirtieron deficiencias en la obra de Pozo Negro, que consta en la construcción del puente en la torrentera. Mostraron su preocupación y esperan solución del alcalde distrital, Marco Antonio Anco.
Según denunciaron, habría modificaciones en la altura de la vía que afecta el acceso directo de las viviendas. Sumado a ello, preocupa el avance y término de los trabajos.
Isaac Cayra, vocal del frente defensa de Pozo Negro, indicó que la obra, lejos de beneficiar a las familias, especialmente en temporada de lluvias, ha generado un cierto perjuicio. Advirtió que las casas están prácticamente enterradas casi un metro por debajo del nivel de la pista.
“Nuestras casas están quedando enterradas, no tenemos acceso, incluso tengo un negocio y no se puede. Nos cierran entradas”, indicó a Correo.
Explicó que la altura de la calle, según expediente técnico, tendría una altura de máximo 20 centímetros, no obstante, no se habría cumplido. “La altura que vemos es casi un metro. Esperamos que nos entiendan, esto no es dable”, afirmó.