Desde tempranas horas de la mañana de este sábado 1 de noviembre, cientos de familias acudieron al Cementerio El Carmen, en el distrito de Chiclayo, para rendir homenaje a sus seres queridos con motivo del Día de Todos los Santos.
Con flores, velas, coronas y música, los visitantes recorrieron los pasillos del camposanto, que lució lleno desde las primeras horas. Algunos aprovecharon para limpiar y pintar las tumbas, mientras que otros llevaron serenatas o rezos en memoria de los familiares fallecidos.
El ambiente, aunque marcado por la nostalgia, también estuvo acompañado de gestos de unión familiar y fe. Muchos visitantes llegaron desde distintos puntos de la provincia, incluso desde distritos como José Leonardo Ortiz y La Victoria, para cumplir con la tradición.
Autoridades locales informaron que se dispuso un plan de orden y seguridad con apoyo de la Policía Nacional y personal municipal, a fin de garantizar el tránsito peatonal y vehicular en los alrededores del cementerio. Además, se instalaron puestos de venta de flores, velas y alimentos, generando también movimiento comercial en la zona.
“Venimos todos los años, es una forma de mantener viva la memoria de quienes ya no están”, comentó Rosa Flores, vecina del distrito de Monsefú, mientras colocaba un arreglo floral en la tumba de su padre.
Las visitas continuarán durante el domingo 2 de noviembre, fecha en la que se conmemora el Día de los Difuntos, y se espera una afluencia aún mayor de personas en los distintos cementerios de la región Lambayeque.





