Sicarios interceptaron unidad y desataron una lluvia de balas. El ataque, aparentemente dirigido por “Los Chukis”, también dejó a un pasajero gravemente herido
Sicarios interceptaron unidad y desataron una lluvia de balas. El ataque, aparentemente dirigido por “Los Chukis”, también dejó a un pasajero gravemente herido

La gravedad de la situación de violencia en el país se mantiene a pesar de los evidentes esfuerzos puestos en marcha por el nuevo gobierno.

Así lo indican los hechos registrados, la noche del último viernes. Ese día, un conductor de combi fue asesinado a balazos mientras transitaba por la avenida Néstor Gambetta, cerca del nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, en el Callao.

Según confirmó la Policía, la víctima fue identificada como Walter Leoncio Sandoval Castro (53).

Este trabajador del transporte público murió al instante al recibir varios balazos frente a varios pasajeros.

Según los testigos, los criminales interceptaron la unidad a bordo de una motocicleta cuando esta ya se dirigía a su último paradero.

Los familiares de la víctima llegaron a la zona y lamentaron el hecho, en medio de escenas de mucho dolor.

En tanto, uno de los pasajeros del vehículo resultó herido durante el criminal ataque. Los agentes del orden confirmaron que recibió un balazo en la pierna izquierda, por lo que fue trasladado de emergencia al hospital Alberto Sabogal, del Callao.

Ataque extorsivo

El ataque contra la combi, perteneciente a la empresa de Ramón Castilla, que derivó en la muerte de Sandoval Castro, fue perpetrado por mafias de la extorsión, confirmaron las pruebas halladas en el lugar de los hechos.

Tras el ataque, los criminales dejaron una misiva firmada por la banda criminal “Los Chukis”, que llevaba una bala para mayores señas criminales.

“Esto es para todas las combis de Ventanilla y Pachacútec con dirección a Lima y Callao”, se lee en la carta, en la que también se consigna un número de contacto.

La empresa recibía amenazas desde hace un tiempo, dijeron presentes en la zona del crimen. Los peritos de la Policía llegaron a la zona para recopilar pruebas que lleven a detener a los implicados.