Las dietas que circulan en internet y prometen una rápida pérdida de peso pueden tener graves consecuencias para la salud, como desequilibrios nutricionales, pérdida de masa muscular, daño a órganos y trastornos alimenticios, según especialistas de la Clínica Ricardo Palma.
La licenciada Karen Velásquez, coordinadora del Servicio de Nutrición de dicha clínica, explicó que muchas de estas dietas son altamente restrictivas y se basan en generar un déficit calórico extremo, sin considerar las necesidades individuales de cada persona.
“Cada organismo es distinto. Lo que funciona para una persona puede no ser adecuado para otra. Una dieta mal diseñada puede causar ansiedad, baja autoestima e incluso trastornos como anorexia o bulimia”, advirtió Velásquez.
Señales de alerta: cómo reconocer una dieta peligrosa
Una dieta puede considerarse poco saludable y potencialmente riesgosa cuando:
- Promete pérdidas rápidas de peso (por ejemplo, 5 kilos en una semana).
- Elimina grupos completos de alimentos, como carbohidratos o grasas.
- Sustituye la evidencia científica por testimonios o fotos “antes y después”.
Entre las dietas más difundidas y riesgosas en internet, la especialista mencionó:
- Dieta Keto: elimina casi por completo los carbohidratos y aumenta el consumo de grasas, llevando al cuerpo a un estado de cetosis que puede afectar el hígado y los riñones.
- Dietas de jugos: restringen la ingesta a jugos de frutas y verduras, lo que genera déficit de proteínas, hierro y calcio.
- Dietas de un solo alimento: como la del repollo o el pomelo, son nutricionalmente insuficientes.
- Ayuno intermitente: aunque puede tener beneficios si se realiza con supervisión médica, no debe practicarse sin control profesional.
Cómo bajar de peso de forma saludable
Los expertos coinciden en que la pérdida de peso segura debe basarse en hábitos sostenibles, no en restricciones extremas.
Esto implica mantener una alimentación equilibrada, con frutas, verduras, proteínas, granos integrales y grasas saludables, así como respetar horarios de comida y escuchar las señales de hambre y saciedad del cuerpo.
“Bajar de peso no debe ser sinónimo de sufrir o pasar hambre, sino de aprender a comer con equilibrio y constancia. El acompañamiento de una nutricionista es fundamental para evitar riesgos”, subrayó Velásquez.
También recomendó realizar actividad física diaria y fomentar en los niños una relación sana con la comida, basada en el bienestar y no en la apariencia.
Datos clave
- Fuente: Clínica Ricardo Palma
- Vocera: Lic. Karen Velásquez, coordinadora del Servicio de Nutrición
- Principales riesgos: daño a órganos, pérdida muscular, ansiedad, anorexia y bulimia
- Dietas con más riesgos: Keto, de jugos, de un solo alimento y ayuno intermitente sin supervisión
- Recomendación: acudir a un nutricionista y evitar dietas restrictivas sin sustento científico





